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16 de abril de 2001

Página cultural del diario Noticias de Palencia

Por Jesús Castañón Rodríguez

Página cultural del diario Noticias de Palencia

Número 33. 2 de junio de 1983.

Guía de la Villa Romana de Quintanilla de la Cueza, de Miguel Ángel García Guinea

Tras citar las principales excavaciones romanas en las que el profesor García Guinea lleva ya treinta años trabajando en la restauración de nuestro inapreciable patrimonio artístico y concretamente en las del mundo romano, de la talla de Villajimena, muralla de Cildá, poblamiento romano de Mave, Quintanilla de la Cueza, Pedrosa de la Vega, Villabermudo… se recalca la magnitud de esta villa, muy rica en hallazgos de todo tipo y significativa de la importancia de los grandes «seniores» agrícolas, que tanta eficiencia agrícola demostraron en nuestra provincia entre los siglos II y V. La finca de Quintanilla de la Cueza, cuyo plano adjuntamos para mayor claridad, debió de alcanzar su mayor cota de población y riqueza agrícola organizada entre los siglos II y finales del IV.

Se halla situada en la cuenca del río Cueza, afluente del Carrión, muy cerca de Villoldo, a sólo dos kilómetros de Cervatos de la Cueza, en el llamado Pago de Tejada o «de las excavaciones o los mosaicos», nada más atravesar el pueblo de Quintanilla en dirección a Sahagún.

Entre los extraordinarios mosaicos destaca el «Mosaico de las Cuatro Estaciones» o «del emblema oceánico» (láminas 91 a 13 a todo color).

Parecida importancia tuvieron los decorados y pinturas de algunas de las 33 habitaciones excavadas en los tres bloques hasta ahora conocidos.

No menos interesante el sistema de calefacción, con su horno central.

Y el hallazgo de sortijas y fíbulas.

Bien está que a las numerosas guías de la ciudad, se nos añadan ahora dos guías de villas romanas. El visitante podrá conocer así mejor esta vieja Tierra de Campos, llena de arte de cualquier época. Romana, románica, gótica, renacentista… Buen sistema este que la Excma. Diputación ha puesto en práctica para ir conociendo mejor esta eterna Bella Desconocida, que no sólo es la Catedral sino también la provincia de Palencia.

Pedro Palol.- Diputación de Palencia; Imprenta Provincial, 1982

La Villa Romana de la Olmeda

Interesante esta» guía del visitante», escrita con apasionamiento de técnico por el catedrático director de las excavaciones durante varios años, Pedro Palol, durante años destinado en nuestra Universidad de Valladolid, que junto con Javier Cortés, propietario de la finca en el momento del hallazgo y hoy al frente del patronato creado por la Diputación para custodiar el grandioso tesoro arqueológico.

La excepcional villa romana de La Olmeda en Pedrosa de la Vega, está formada por restos de dos épocas distintas: «una villa rural, que fundada a fines del siglo I de la era, vivió hasta la crisis económica y social del siglo III» y una reedificación -de nueva planta y en distinto lugar- en fecha temprana del siglo IV, perviviendo a lo largo del mismo y posiblemente del siglo V, incluso hasta fecha indeterminada -quizás en el siglo VI- en que «fue destruida y abandonada sin que sus habitantes volvieran a recuperar nada de la residencia destruida».

Su mejor momento se corresponde a la época teodosiana, momento de la decadencia ciudadana, en que, la aristocracia romana- municipal se retira en las villas rurales, decoradas con ciclos pictóricos o de mosaico del más alto valor artístico, muchas veces reflejo del arte cortesano oficial.

Por su parte, como consecuencia de constituir la caza una de las principales ocupaciones de estos grandes propietarios rurales, aparecen, junto a mosaicos alusivos al tema, diversos instrumentos relacionados con las armas de la caza y con los aparejos de las caballerías.

Estos son en concreto los dos temas sobresalientes en los extraordinarios mosaicos de La Olmeda, en Pedrosa de la Vega; una habitación de 172 metros cuadrados totalmente cubierta por mosaicos, en cuyo centro, dentro de un recuadro de 4,70 por 3,75 hay una escena figurada con la representación de Aquiles descubierto por Ulises en el gineceo del rey Licomedes en la isla de Skyros, en donde el héroe griego se ocultaba disfrazado de Pirra, una de las muchachas del gineceo. El astuto Ulises ha dejado caer entre los objetos de regalo para las jóvenes un escudo y una lanza, haciendo sonar al mismo tiempo las trompetas de sus soldados. Bajo los disfraces femeninos surge, con asombro de las muchachas el guerrero Aquiles.

Un amplio marco ornarmental -ánades afrontados, medallones, retratos de posibles familiares del propietario- rodea esta gran escena central de Aquiles en Skyros.

Además de otros mosaicos geométricos de diversas y logradas formas, la otra composición sobresaliente de mosaicos la constituye las escenas de cacería también de extraordinaria belleza como puede comprobarse en esta breve, pero excelente guía aperitivo para la visita de una de nuestras mayores riquezas arqueológicas, por desgracia todavía no conocida suficientemente.-

Cierran el libro otra serie de interesantes datos sobre poblaciones medievales de la villa y sobre sus instalaciones funerarias -hoy conservadas en el Museo de Saldaña- así como un imprescindible itinerario de visita.

El estilo escueto y documentado al mismo tiempo es digno de particular elogio y agradecimiento por parte del lector.

Monumento a Jorge Manrique: proyecto de León Coullaut

Incluye el boceto del monumento y un mapa que indica la ruta desde Madrid a Santa María del Campo Rus (Cuenca).

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